miércoles, 31 de diciembre de 2008

Varon

¡Me giedin los hombris que son medio jembras!
Cien vecis te ije que no se lo dieras;
que al chiquín lo jacían marica
las gentis aquellas.
.Ahora ya lo vide, y a mi no me mandis
más vecis que güelva.
Te largas tú a velo,
que pué que no creas
que tu cuerpo ha parío aquel mozo,
ni que lo cebasti Con tu lechi mesma,
ni que tieni metía en la entraña
sangri de mis venas.
N'amas de mimarros
y delicaezas
se ha queao lo mesmo que un jilo
paliúcho y sin chispa de juerza.
Cá instanti se lava,
cá inslanti se peina,
cá instanti se múa
toa la vestimenta,
y se encrespa los pelos con jierros
que se lo retuestan,
en los dientis se da con boticas
de unos cacharrinos que tieni en la mesa,
y remoja el moquero con pringuis
n'amás pa que güela.
¡Giedi a señorita
dendi media legua!
Se levanta a las nuevi corrías
y a las doci lo menos se acuesta.
¡Va a ponersi pochu
si acotina de aquella manera!
¡Güeno está pa mandalo a bellotas,
pa ayualmi a escuajal en la jesa,
pa jacel un carguju de tarmas
y traélo a cuestas,
u pa estalsi cavando canchális
dende que amaneci jasta que escureza!
Los muchachos de acá me esconfio
que mos lo apedrean
cuantis venga jaciendo pintura
su jablando de aquella manera,
y verás cómo el mozo no tieni
ni agallas ni juerza
pa el primero que quiera moflarsi
rompeli la jeta.
Ya no dici padri,
ni madri,
ni agüela."
Mi papá, mi mamá, mi abuelita..."
así chalrotea,
como si el mocoso juesi un señoruco de los de nacencia,
ni mienta del pueblo,
ni jace otro oficio
que dil a una escuela
y palral e bobás que allí aprendi,
que pa ná le sirvin cuantis que se venga.
Pa sabel sus saberis le ije:
"Sácame la cuentadel aceiti que hogaño mos toca
del lagal po la parti que es nuestra.
Se maquilan sesenta cuartillos
p'acá parti entera,
y nosotros tenemos, ya sabis,
una media tercia
que tu madre hereó de una quinta
que tenía su agüela Teresa.
¡Ya ves tú que se jaci en un verbo!
Sesenta la entera,
doci pa la quinta,
cuatru pa la tercia,
quita dos pa una media,
y resultan
dos pa la otra media.
Pus el mozu empringó tres papelis
de rayas y letras
y pa ensenrearsi
de aquella maeja
ijo que el aceiti que a mi me tocaba
era "pi menus erre", ¿te enteras?
¡Pus pués dil jacindu
las sopas con ella!
¿Y esos son saberis?
¡Esas son fachendas!
No le quise mental del guarrapo
ni icile siquiera
que hogañazo vendimos el churru
pa compral un cachuju de tierra.
¡Allí no se jablade esas cosas ni en ellas se piensa!
N'amás que se jaci comel confituras
melcal vestimentas,
dirse a los cafesis,
dirse a las comedias
y palral de bobas que no valin
ni siquá una perra.
¡Jolgacián como el nuestro muchacho
no va a habelo, si aquí no se almienda
!Yo no lo distingo de otros señorinos
que con él se ajuntan y jolgacianean.
¡Son como maricas¡
¡Júy, qué vestimentas!
Ves una presona
por detrás, en la calli, tan tiesa
y endi lejus no sabis de cierto
si es macho u es jembra.
Güelen a lo mesmu
como las ovejas,
y p'aquí no es asín, que cá cosa
güele a su manera:
güeli a macho la carni de hombri
y la carni de jembra da a jembra.
Hay que dil a buscar al muchacho
cuantis que se puea,
le dicis a aquellos señoris
que esu no quita pa que se agraeza,
pero que a su padri le jaci ya falta,
y asín se la enreas.
No lo quió jolgacián, aunque muchos
saberis trujiera.
Y no es esu solu lo que a mí me enrita,
que otras cosas me jacin más mella...
Hay que dil a buscalo cá y cuando,
que venga, que venga,
porque mira, me giedin los hombris
que son medio jembras.

Poesias en castuos

GABRIEL Y GALAN, Hijo de campesinos nació en Frades de la Sierra (Salamanca), poeta desde muy joven, estudio magisterio y después de ejercer unos años, se caso con una extremeña,dejo la enseñanza y se fue a vivir y trabajar al campo a Guijo de Granadilla (Cáceres), es apartir del convivir con el pueblo EXTREMEÑO,que siente la necesidad de escribir en castuó,para contar las costumbres, pesares y sentires de aquella gente humilde.





Yo no sé qué tieni,
qué tieni esta tierra
de la extremaúra
que cuantis que llegan
estos emprencipios
de la primavera,se me poni la sangre encendía
que cuasi me quema,
se me jincha la caja del pecho,
se me jaci más grandi la juerza
se me poni la frente möorra
y barruntu que ansina me entra
como un jormiguillo
que me jormiguea... ¡Y luego unas ansias:
que me ajogan de juerti que aprietan
con arrempujonis
de lloral sin querel, que me quean
que cuasis reviento
sin poel revental de la pena!...
¡Me dan unas ganasde metermi con cosas de juerza!...
¡Asín jundo el corti
de la segureja,
que lo mesmu ha caíu esta encina
que si juesi de pura manteca!
Yo no sé qué será lo que adrento
me escarabajea
cuantis llega esti tiempo tan güeno
de la primavera...
Digu yo que serán estos vahus que jecha la tierra,
que güelin a ricos
y paice que, asín que se cuelan,
comu que arrempujan
de adrento pa juera,
y levantan el pecho pa arriba,
y entontecin de gustu que quean...
¡Juy, cómu me sabin!...
¡Juy, Dios, y qué juerza!
Si viniese ahora mesmu aquí el Gorio
y quisiesi luchal una güelta...
¡Juy, Dios, qué Goriazo
le jacía pintal en la tierra!
Me gusta esti tiempo
de la primavera,
pero, ¡coño!, me da mucha rabia
no tenel una cosa que puea
sacalmi del cuelpo
el comuelgo na más de la juerza.

domingo, 14 de diciembre de 2008

genete de Tejeda

Manolo paniagua nos envia desde Tenerife esta fotos,













Unas imagenes a nuestro pasado reciente.........



















martes, 18 de noviembre de 2008

¿Se canta o se reza?

Desde Tenerife nos llega este relato, de Manolo el del "Tío Cleto” y la “Tía Clemen”donde a través de sus recuerdo nos cuenta las costumbre de los niños el día de Nochebuena.


Muchos días antes de que saliéramos a la calle, ya nos reuníamos los muchachos del barrio de arriba para organizar la salida a pedir por las casas, el aguinaldo del día de Nochebuena, por aquel tiempo el pueblo estaba estructurado en diferentes categorías sociales, nosotros nos encontrábamos entre los más pobres, en algunas casas del pueblo, no era de buen ver el tener que salir a pedir el aguinaldo el día de Nochebuena, pero. para nosotros era una fiesta y así la disfrutábamos.El día de Nochebuena, el 24 de Diciembre, no era fiesta, por lo cual mi madre tenía que ir a trabajar casi siempre coincidía con la recolección de la aceituna, el año que mas me acuerdo de aquella Navidades, estábamos cogiendo en “Los Gorderos” y como todos los años pedíamos “tarea” o “ajuste” con el fin de terminar antes la jornada de trabajo, y poder ir lo más rápido a casa, para empezar con los preparativos de la cena de Nochebuena.Lo primero era irse al comercio de la Sra. Virtudes y esperar a que tocara la vez, y te despachara unos vales, por valor según la familia, que consistía en arroz, patatas, bacalao, unos mazapanes, turrón duro y blando, (aunque en casa cantásemos.-Esta noche si Dios quiere cenaremos un guisado, de perdices y conejo, y la pechuga de un pavo. Ande, ande, ande .la marimorena. Ande, ande que es la Nochebuena). Mientras nuestras madre preparaba todo, nosotros nos reuníamos un grupo de unos 5 o 6 y en el cancho de la puerta de tía María, nos poníamos a ensayar: unos con las tapaderas, otros con una pandereta (a la que siempre le faltaba alguna pieza,) otro, el más afortunado, con la zambomba, la botella de anís y el almirez, Esos eran todos los instrumentos que teníamos para salir a pedir el aguinaldo, Después vendría el ensayo de los villancicos,, casi todos aprendidos de oída con la particularidad de que casi nunca nos sabíamos las letras completas pero lo que si nos sabíamos bien era el de .- ANDE, ANDE LA MARIMORENA ANDE, ANDE QUE ES LA NOCHEBUENA. Había otros que también cantábamos con mucho énfasis que era: LA VIRGEN SE ESTA PEINANDO ENTRE CORTINA Y CORTINA LOS “CABALLOS” SON DE ORO Y EL PEINE DE PLATA FINA. (Nosotros desconocíamos que a los pelos se la llamaba “cabellos”). Una vez que todo estaba en orden y cuando ya había oscurecido salíamos a recorrer el pueblo casa por casa, las casas que visitábamos eran todos los años las mismas y ya sabíamos más o menos donde nos iban a atender y donde no; el recorrido era el que hacia las procesiones y el protocolo el mismo: llegábamos a la puerta tocábamos el picaporte y cuando contestaban preguntábamos a voz a grito ¿SE CANTA O SE REZA? En algunas nos decían ni se canta ni se reza; en otras se canta, y en pocas se reza. En estas, las del rezar, era porque hacía poco que había fallecido algún familiar y allí estábamos nosotros, con más pasión que devoción, rezando el Padre Nuestro. Donde se cantaba era la ocasión: los dueños habrían el portón y parte de la familia por dentro y nosotros en la calle empezábamos con el “ande, ande, la marimorena ande, ande, que es la Nochebuena”. Al terminar nos obsequiaban con mazapanes, peladilla, alguna naranja y con un poquito de suerte unas perras chicas y muy pocas perras gordas; todo esto se ponía en una cesta que llevábamos para la ocasión y al terminar en casa de uno de nosotros se repartía a partes iguales. ¡Cuántas Nochebuenas los únicos dulces y dinero que teníamos era lo que nos habían dados pidiendo el aguinaldo! Desde aquí quisiera dar las gracias de todo corazón a todas las gentes que nos ayudaron: de verdad muchas gracias, pero en particular a dos mujeres, madre y hija que nunca nos dieron con la “puerta en las narices” como fueron TIA SARTURNA y su hija GERTRUDIS, Gracias desde Tenerife donde vivo todas las Nochebuenas. Aquí también intento no perder esa costumbre y salgo con mis hijos, hermanos y sobrinos “a pedir el aguinaldo” por las casas de algún amigo que se sorprende tanto de esta costumbre como los turistas que nos encontramos en el recorrido, y ya cuando les preguntamos “¿Se canta o se Reza? Nos reconocen y desde dentro se oye una voz que dice: ¡SE CANTA!MUCHAS FELICIDADES A TODOS LOS PAISANOS SE ENCUENTREN DONDE SE ENCUENTRENMANUEL PANIAGUA SANCHEZ.

domingo, 9 de noviembre de 2008

El Pueblo - Por Mari

Este blog que se inaugura hoy con este testimonio de una ”galleguita” en el que con su relato nos traslada a otros tiempos. A este administrador se le han saltado unas lagrimitas, recordando a esos Tejedanos que por desgracia ya no están con nosotros pero al mismo tiempo satisfecho que esos sentimientos y recuerdo vean la luz a través de este Blog, con este testimonio ya ha valido la pena. “Porque solo muere lo que se olvida” Gracias Mari. Y las gente de Murcia, Madrid, Barcelona etc. mandad vuestros recuerdo.
EL PUEBLO
No sé si sabré plasmar todos los sentimientos que emanan de mi recuerdo, el recuerdo lejano cargado de emociones de una infancia…. Los aromas de las jaras y el tomillo, de las casas a pueblo, a picón, a aceite, a queso de cabra y a higos…Los sabores a perrunilla, a granadas, a uvas y a huesillos ….a las sopas de tomate, al pisto, a las migas…. Los colores, el blanco de las casas, la piedra de la iglesia, la dehesa , el rojo de los pimientos y el verde y negro de la aceituna…
El verano e ir a Tejeda, significaba para los niños en mi casa paz y libertad….Llegaba el momento en el que se acaban los horarios, no había riñas y a cambio al llegar allí, recibías la alegre acogida de unas gentes amables y hospitalarias, un pueblo de casas con puertas abiertas de gente sencilla y amigable…….y en el que además para mi sorpresa ¡¡¡Todos eran tíos!!!.... yo estaba emocionada… Tanta familia y daba igual que lo fuesen ó no…..todos eran tíos.
La abuela Sofía decía:
Mª Carmen ven ca tía Clemen que te dé lo que le he encargao.
Ven en ca tia Colasa que le diga al tio Frasco que venga pa hablar con él.
Mi niña que si ves al tío Cleto y va al campo no se olvide de cogerme unos poquininos de higos, y dí a tía Juana que la espero pa que vayamos a por agua a la fuente y a la tía Victoria, que venga Victorita que me tiene que hacer un mandao.
Ve y di a tía Manuela que habeis llegao y que irá Paquito a ver a tío Ramón, no te olvides de ir en ca tio Rafael y da un beso a Tia Mª Rosa….
Y….¡¡todos eran tíos!!...¡¡increíble!!
Mi recuerdo……..bajar corriendo del coche después de haber recorrido setecientos y pico Kilómetros , entrar a casa de mis abuelos besarles y salir pitando a buscar a mis amigos y a ver a esos tíos tan entrañables y que con tanto cariño siempre me recibían…..e iba de casa en casa, feliz para decirles oye que ya llegué y os he echado muchísimo de menos…….
Mis amigos… Jose ¡mi protector! (cuánto le eché de menos tantos años preguntando a la Clemen na más llegar al pueblo ¿Y Jose tía Clemen?..... ¿Y Justi?), Justi, Fati, Meme, Blanki, Anamari……..
El primero en desaparecer fue el Jose (que ahora he recuperado gracias a no se que caprichos del destino), luego se fue Meme y sus hermanas, luego Justi…… y Ana Mari… y así pasaron los años….y poco a poco todos se fueron yendo…..¡Hasta yo dejé de ir!. Pero me queda el recuerdo imborrable de un patio de una casa en el que las niñas jugaban con sus muñecas, las peinaban y relataban qué harían de mayores. El recuerdo de aquel amigo fiel que me acompañaba, me paseaba en burro y me defendía, y con el que de regreso a casa ya de noche y llena de pulgas después de haberme pasado el día en corral de las cabras ó subida al campanario, escuchaba sus historias frescas disfrutando de esa sonrisa amplia y afable que aún conserva. y mientras, pensaba en la bulla que me iba a echar la abuela porque llegaba toda sucia a casa.
Mis primos… era algo que yo tardé en comprender….Si los mayores eran todos tíos ,¿Porqué los pequeños no eran mis primos? Con el tiempo aprendí a identificar los primos y los amigos.
Hoy cuando regreso después de años, más de veinte, e identifico a alguno de esos primos que saludo con un ¡Hola primo! Y me miran sorprendidos, como diciendo ¿Y esta loca de dónde ha salido?,…lo sigo haciendo con la ilusión y el cariño de aquella niña que era feliz por regresar al lugar donde se sentía en libertad........Primos ó no el saludo afable y alegre sigue acompañando a la gente de éste que en mi corazón siento mi pueblo.


En Vigo a 3 de noviembre de 2008